"El festín de la inmundicia de la familia Guzmán Gardeazábal" |
La corrupción y la afectación al medio ambiente han estado unidos desde hace siglos. La de forestación, fracking, caza de especies, sequía, saqueo desmedido de los mantos freáticos han causado un grave impacto al ecosistema, afectando el equilibrio del medio ambiente, dando entrada a un cambio climático que impacta en nuestros tiempos y que, en las próximas décadas, será tan evidente que pondrá en peligro la existencia de la raza humana.
La corrupción y el tráfico de influencias en el Estado de Oaxaca han institucionalizado la contaminación y saqueo de los ríos y aguas Oaxaqueñas, con fines comerciales y políticos a favor de la familia Guzmán Gardeazábal, familia enquistada en los sexenios desde la época del exgobernador Diodoro Carrasco Altamirano hasta el presente. A través de la empresa GUGAR, se han servido y contaminado las aguas del valle de Oaxaca, aprovechándose de su posición política y de engañar a las poblaciones de Tlalixtac de Cabrera y San Bartolo Coyotepec. Operado a través de Jesús Carlos Patricio Guzmán Gardeazábal, socio político y comercial de personajes de la política Oaxaqueña, e imagen y dueño de la empresa GUGAR, ha rebasado la figura de empresario, para utilizar el tráfico de influencias y corrupción a favor de su familia, sin importar que su empresa sea un foco de contaminación del agua Oaxaca.
Jesús Carlos Patricio Guzmán Gardezábal |
Desde la obtención de contratos públicos, colocación de familiares dentro de la estructura de primer nivel del actual gobierno estatal, como lo fue Gabriela del Refugio Velázquez Rosas (primera Secretaria de Salud de Oaxaca, en el Gobierno de Alejandro Murat Hinojosa), esposa de Jesús Carlos Patricio Guzmán Gardeazábal.
Guzmán Gardeazábal y Velázquez Rosas (foto: Facebook) |
Así como su sobrino Juan Pablo Guzmán Cobain, actual Secretario de Economía de Oaxaca.
Guzmán Gardeazábal ha sabido “barajear” sus cartas políticas para hacerse de concesiones en el sur - sureste del país, abarcando las mismas en Oaxaca, Chiapas y Michoacán. A través de dichas concesiones dadas por la Comisión Nacional Agua, y especificamente en Oaxaca sustraer de los mantos freáticos del Valle de Oaxaca, en Tlalixtac de Cabrera y San Bartolo Coyotepec, millones de litros agua desde el año 1994.
Según la base de datos del REPDA del Sistema de Información del Agua de la Comisión Nacional del Agua, la familia Guzmán Gardeazábal, se ha hecho dueña de siete concesiones para extraer aguas nacionales o descargar aguas residuales en ríos o cuerpos de agua de la capital. A través de sus denominaciones sociales GUGAR SODA S.A DE C.V , ENVASDORA GUGAR S.A DE C.V y COMERCIAL GUGAR SODA S.A DE C.V, han contaminado por más de 20 años el liquido vital del Valle de Oaxaca.
Los propios datos del SIA de la CONAGUA, informa que entre los años 1994 y hasta el 2026 la empresa GUGAR, a través de dichas denominaciones cuentan con las siguientes concesiones, para extracción de aguas subterráneas: 05OAX133625/20FPGR04; 05OAX133613/20FMDA14; 05OAX100641/20FMDA17 y 05OAX159175/20EPDA17. En los mismos términos, cuentan con concesión para descarga residual en ríos y cuerpos de agua: 05OAX135307/20FSOC08; 6OAX100706/20FPGE94 y 5OAX134366/20FQDA15.
La primera de ellas, obtenida en el sexenio de Diodoro Carrasco Altamirano, fue la 6OAX100706/20FPGE94, emitida a favor de Envasadora GUGAR S.A DE C.V, registrada el 29 de agosto de 1994, con el objetivo de descargar residuos de su empresa en el Río Salado, en el área del municipio de Tlalixtac de Cabrera. Según los propios datos de la concesión, la empresa tenía permitido, realizar descargas residuales de 12.592.50 de m3 al año. Es decir 12,592,500 millones de litros de agua al año. Dicha concesión tuvo vigencia de un año.
La segunda concesión, 05OAX100641/20FMDA17, emitida el 09 de octubre de 1995, a favor de la empresa Envasadora GUGAR S.A DE C.V, tenía autorizado extraer 100,000.00 m3 de agua al año, de los mantos freáticos de Tlalixtac de Cabrera, es decir 100,000,000 de litros por año. Dicha concesión comenzó a operar en el sexenio de Ulises Ruíz Ortiz, el 23 de julio de 2007 concluyendo el 22 de julio de 2022. Según los datos de la CONAGUA, con esta concesión, la empresa GUGAR, extrajo de los mantos acuíferos de Tlalixtac de Cabrera 1,500,000,000 (mil quinientos millones de litros de agua) en quince años.
En 2004, la empresa Comercial GUGAR S.A DE C.V, obtuvo la concesión 05OAX133625/20FPGR04, registrada el 21 de mayo de 2004, con vigencia del 23 de marzo de 2004 al 22 de marzo de 2014. A dicha concesión, le fue autorizado la extracción de 2,821.0 m3 al año del manto acuífero de Tlalixtac de Cabrera, es decir 2,821,000 litros al año. De los 10 años que duró la concesión, la empresa GUGAR extrajo 28,210 m3 de agua convertido a litros 28,210,000 millones de litros del liquido vital.
En el mismo año, la empresa GUGAR, se expandió en la extracción de agua a San Bartolo Coyotepec, a través de la concesión 05OAX133613/20FMDA14, emitida a favor de la Envasadora GUGAR S.A DE C.V, registrada el 12 de abril del 2004, y autorizada para extraer al año 30,530 m3 de agua de los mantos de agua de San Bartolo Coyotepec, lo cual resultaría en 30,530,000 de litros de agua al año. La concesión tendría una vigencia de 08 de mayo de 2004 al 08 de mayo de 2024. Dicha concesión tendría como total de extracción 610,600 m3 de agua o 610,600,000 millones de litros de agua, de San Bartolo Coyotepec.
En el sexenio de Ulises Ruiz Ortiz, la familia Guzmán Gardeazabal a través de la empresa Envasadora GUGAR S.A DE C.V, recibió una nueva concesión, la 5OAX134366/20FQDA15, registrada el 28 de febrero del 2007, con el objeto de realizar descargas residuales en acuíferos de San Bartolo Coyotepec y vigencia del 24 de junio de 2006 al 23 de junio de 2026. La concesión autoriza para descargar 1,157.00 m3 al año, es decir 1,157,000 litros al año de aguas residuales industriales, provenientes de la empresa GUGAR. Dicha empresa en 20 años arrojará 23,140 m3 de aguas residuales ó 23,140,000 millones de litros de aguas residuales al acuífero de San Bartolo Coyotepec Oaxaca.
En el mismo sexenio, la familia Guzmán Gardeazabal obtuvo una nueva concesión, la 05OAX135307/20FSOC08 a favor de la empresa Envasadora GUGAR S.A DE C.V, registrada ante la CONAGUA el 21 de mayo de 2008 y con el objetivo de descargar aguas residuales al Rio Salado y al Rio Atoyac, en la zona de Tlalixtac de Cabrera. Dicha concesión autorizó a la familia Guzmán Gardeazabal a descargar en dichos ríos la cantidad de 10,000 m3 de agua al año, es decir 10,000,000 millones de litros al año de aguas residuales en dichos cuerpos de agua. La concesión comenzó a operar el 28 de agosto de 2007 y concluyó operaciones el 27 de agosto de 2017, en dicho tiempo la empresa GUGAR, descargó 100,000 m3 ó 100,000,000 millones de litros de aguas residuales al río Salado y Atoyac, en la zona de Tlalixtac de Cabrera.
En 20 años la empresa GUGAR, extrajo de las aguas del valle de Oaxaca 2,246,810,000.00 litros de agua tanto en San Bartolo Coyotepec como Tlalixtac de Cabrera.
Al mismo tiempo en que se realizaba la extracción, la empresa encabezada por Jesús Carlos Patricio Guzmán Gardeazábal contaminó 135,732, 500.00 millones de litros de agua. Dichas aguas fueron vertidas al Rio Salado y Rio Atoyac, en Tlalixtac y en los mantos acuíferos de San Bartolo Coyotepec.
En 2022, en el Estado de Oaxaca 132 municipios sufren sequía moderada, y a su vez 5 municipios de Oaxaca son afectados por una sequía extrema.
La familia Guzmán Gardezábal a través de su empresa GUGAR, es parte de la contaminación de los ríos Atoyac y Salado, según los propios datos de CONAGUA, ambos ríos presentan contaminación del 98% de sus aguas, además de las descargas de drenaje de los diferentes municipios conurbados de la capital Oaxaqueña, está como responsable la empresa GUGAR, con una aportación de 135 millones de litros de desechos industriales, es parte de esta afectación al medio ambiente.
La corrupción y el ambiente, tienen un enlace en un México donde no importa la calidad de vida que puedan tener tus ciudadanos, mientras que a los empresarios y políticos les deje ganancia, ellos podrán seguir realizando un saqueo desmesurado de los recursos naturales de las regiones de Oaxaca. Carlos Guzmán Gardeazabal, "terrateniente del agua", no habría podido constituir su imperio de extracción y contaminación de agua, sin el apoyo político de los gobierno estatales y federales. Las comunidades afectadas son las que deberían de reclamar esta afectación y ponderar entre el medio ambiente y lo económico.
Carlos Guzmán Gardeazabal, pretende continuar con su imperio de contaminación en el sexenio del MORENISTA, Salomón Jara Cruz, gobernador electo de Oaxaca. Los datos son duros y oficiales. ¿ Jara Cruz, esta vez será primero los Oaxaqueños?, o ¿los intereses políticos de familias que han ejercido trafico de influencias y corrupción en los sexenios priistas?