Juan José Díaz Bermúdez/Análisis
Oaxaca, México ( Punto y Aparte ).- La Procuraduría General de la República ( PGR), hasta el momento se a negado por cuestiones políticas, a revelar la identidad político- militar de los profesores y "luchadores sociales", que presuntamente llevaron a cabo el secuestro de los niños Álvarez Benfield en Oaxaca el 14 de enero de 2013 y los cuales fueron rescatados el 18 de mayo de este mismo año, con la detención de 12 de los plagiarios, aunque a decir de los agentes la célula la conformaba una unidad de aproximadamente 30 personas tanto en Oaxaca como en el Estado de México.
Los presuntos secuestradores según indagatorias de los investigadores que participaron en las pesquisas,pertenecen al Ejército Popular Revolucionario ( EPR), y tenían como jefe de la misión (secuestro) a José Ambrocio Martínez o José Ambrocio Martínez Gómez de 50 años de edad y no a Damían Gallardo Martínez como la PGR quiere hacer creer. Porqué proteger a Ambrocio Martínez ¿a quién conocen con el alias del comandante "Simón"?
La PGR se olvida de los perfiles de todos y cada uno de los participantes en el secuestro de los niños Álvarez:
José Ambrocio Martínez o José Ambrocio Martínez Gómez, es considerado el comandante del Ejército Popular Revolucionario en la regional de Oaxaca, fue señalado reiteradamente por habitantes de San Agustín Loxicha, La Sirena y Tierra Colorada en los Loxichas, como el autor de un sin número de ataques en contra de quienes los eperristas creían eran delatores. Identificado a la sección XXII del SNTE y a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación ( CNTE), participó abiertamente en las "brigadas móviles" que la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca, realizó de los ataques en contra de instituciones y personas que tras asambleas consideraban non-gratas para su movimiento y se le vincula por su amistad con los desaparecidos, Gabriel Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya, los cuales no han sido vistos desde 2007 y los cuales pertenecen al EPR.
Durante el seguimiento de las investigaciones que hay que considerar no solo fueron llevadas por la PGR, se encontraron suficientes motivos para pensar que los presuntos secuestradores de los infantes Álvarez Benfield, eran parte de una organización guerrillera debido al lenguaje usado en los documentos enviados a los familiares de los secuestrados, pruebas de cargo que por cierto jamás fue exhibida por temor a las represalias de la sección XXII del CNTE que protege a este grupo de presuntos secuestradores. En los documentos según testigos se hablaba de la descomposición social, de las clases dominantes y oligarcas y además de la justicia revolucionaria que se estaba aplicando al considerar que el secuestro era parte de expropiación y botín revolucionario. Estos documentos jamás fueron presentados y nadie dentro de la PGR sabe de ellos.
La PGR hábilmente sin que haya un razonamiento para ello, desvió la atención de José Ambrocio Martínez o José Ambrocio Martínez Gómez, para colocarla en Damían Gallardo, a quién colocaron en la dirigencia del grupo, cuando este sujeto también parte de la guerrilla eperrista y miembro de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca ( APPO), solo tenía el grado de combatiente, no así José Ambrocio Martínez, que es considerado por instituciones de inteligencia comandante del EPR y ex participante de otros presuntos secuestros entre ellos el de un ganadero y agricultor en el 2007, plagio en el que también habrían presuntamente participado Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, según se habla en los círculos militares.
Junto con José Ambrocio Martínez y/o José Ambrocio Martínez Gómez, se encuentran otros presuntos miembros del EPR de las unidades Oaxaca y Estado de México, que fueron dejados con un perfil bajo por parte de la PGR, en un intento de no vincular el secuestro con la guerrilla. No se habla de Leonel Manzano Sosa cuñado de Rafael Vicente Rodríguez Enriquez, integrante del EPR y ex dirigente de la sección XXII, asesinado sin que hasta el momento su crimen se haya aclarado, al parecer fue un ajusticiamiento al interior de la misma organización guerrillera debido a la vida que opto por llevar el ex combatiente.
Hay un individuo de nombre Enrique Guerrero Aviña, también presuntos integrante de la estructura del EPR, este sujeto habría participado el 27 de octubre de 2006 durante el enfrentamiento en Santa Lucia del Camino, lugar donde perdió la vida Bardley Ronald Willey mejor conocido como Brad Will. Las instituciones de inteligencia colocan a Enrique Guerrero Aviña como una persona peligrosa, porta arma y es un sujeto al igual que José Ambrocio Martínez dogmático. Enrique Guerrero Aviña alias "Fito", era uno de los hombres de confianza de José Ambrocio Martínez durante el secuestro.
Hay quienes se preguntan, ¿como es que fueron ubicados? Desde un principio el mismo día del secuestro de los niños Álvarez Benfield, una de las líneas de investigación fue la guerrilla, definir que grupo era, fue el reto, no obstante la línea del crimen organizado nunca dejó de estar presente, la guerrilla tomó clara muestra de que hacia esos grupos se inclinaba la investigación. El mismo gobernador de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo, fue informado que los grupos de inteligencia tanto civiles como militares, definían a la guerrilla por su modus operandi como la que había llevado a cabo el secuestro de los niños Álvarez Benfield.
Se le dio seguimiento a diferentes líderes y "luchadores sociales" identificados a la corriente dogmática que el Estado tiene identificados como guerrilleros de diferentes organizaciones, incluso era en el propio edificio sindical de la 22 y el Hotel del Magisterio donde varias de las ocasiones se entrevistaron para planear acciones creyendo que no eran escuchados.
Los cuerpos de inteligencia sabiendo que no le tenían confianza al gobernador de Oaxaca, debido a que los profesores eran sus aliados políticos ( como ahora se demuestra), decidieron en abril de 2013, operar la Unidad de Estrategia Anti Secuestro, que utilizó a expertos en diferentes especialidades: Comunicaciones, Operativo, Encriptación, Guerrilla, Seguimiento y localización, Inteligencia, dando como resultado del seguimiento de profesores de la S-22. El primero que a decir de los detectives se comenzó a seguir fue al profesor Mario Olivera Osorio , el cual en varias de las ocasiones presuntamente se entrevistó incluso en la casa de la Colonia Gómez Sandoval del profesor Erangelio Mendoza González.
Aunque hay que aclarar que la Unidad Especial que contaba con 12 especialistas jamás informó al gobernador de Oaxaca sobre los detalles de las investigaciones, porque temían que hubiera filtraciones, debido a que el mandatario oaxaqueño tiene alianzas políticas con el magisterio democrático y eso ponía en peligro la operación. Esta unidad intervino a petición de la familia de los infantes secuestrados debido a que no hubo confianza en las autoridades del gobierno de Oaxaca. Personalmente Juan José Álvarez Candiani hablaron con el Procurador General de Justicia y con el Secretario de Gobernación para que los ayudará el gobierno federal.
Al final después de casi dos meses fueron identificadas todos y cada uno de los integrantes de la célula, incluso de todos aquellos que desde el Estado de México le daban cobertura operativa, como eran las ordenes que desde la comandancia general se daban en torno a la retención contra su voluntad de los niños Álvarez.
Sin embargo Punto y Aparte que la PGR se reserve el génesis político-militar de los integrantes de la unidad que mantenía secuestrados a los niños, el secuestro se realizó y son presuntos culpables quienes de alguna manera son protegidos por el magisterio de la S-22 y el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué.
José Ambrocio Martínez o José Ambrocio Martínez Gómez presunto comandante del EPR
Oaxaca, México ( Punto y Aparte ).- La Procuraduría General de la República ( PGR), hasta el momento se a negado por cuestiones políticas, a revelar la identidad político- militar de los profesores y "luchadores sociales", que presuntamente llevaron a cabo el secuestro de los niños Álvarez Benfield en Oaxaca el 14 de enero de 2013 y los cuales fueron rescatados el 18 de mayo de este mismo año, con la detención de 12 de los plagiarios, aunque a decir de los agentes la célula la conformaba una unidad de aproximadamente 30 personas tanto en Oaxaca como en el Estado de México.
Los presuntos secuestradores según indagatorias de los investigadores que participaron en las pesquisas,pertenecen al Ejército Popular Revolucionario ( EPR), y tenían como jefe de la misión (secuestro) a José Ambrocio Martínez o José Ambrocio Martínez Gómez de 50 años de edad y no a Damían Gallardo Martínez como la PGR quiere hacer creer. Porqué proteger a Ambrocio Martínez ¿a quién conocen con el alias del comandante "Simón"?
La PGR se olvida de los perfiles de todos y cada uno de los participantes en el secuestro de los niños Álvarez:
José Ambrocio Martínez o José Ambrocio Martínez Gómez, es considerado el comandante del Ejército Popular Revolucionario en la regional de Oaxaca, fue señalado reiteradamente por habitantes de San Agustín Loxicha, La Sirena y Tierra Colorada en los Loxichas, como el autor de un sin número de ataques en contra de quienes los eperristas creían eran delatores. Identificado a la sección XXII del SNTE y a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación ( CNTE), participó abiertamente en las "brigadas móviles" que la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca, realizó de los ataques en contra de instituciones y personas que tras asambleas consideraban non-gratas para su movimiento y se le vincula por su amistad con los desaparecidos, Gabriel Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya, los cuales no han sido vistos desde 2007 y los cuales pertenecen al EPR.
Durante el seguimiento de las investigaciones que hay que considerar no solo fueron llevadas por la PGR, se encontraron suficientes motivos para pensar que los presuntos secuestradores de los infantes Álvarez Benfield, eran parte de una organización guerrillera debido al lenguaje usado en los documentos enviados a los familiares de los secuestrados, pruebas de cargo que por cierto jamás fue exhibida por temor a las represalias de la sección XXII del CNTE que protege a este grupo de presuntos secuestradores. En los documentos según testigos se hablaba de la descomposición social, de las clases dominantes y oligarcas y además de la justicia revolucionaria que se estaba aplicando al considerar que el secuestro era parte de expropiación y botín revolucionario. Estos documentos jamás fueron presentados y nadie dentro de la PGR sabe de ellos.
La PGR hábilmente sin que haya un razonamiento para ello, desvió la atención de José Ambrocio Martínez o José Ambrocio Martínez Gómez, para colocarla en Damían Gallardo, a quién colocaron en la dirigencia del grupo, cuando este sujeto también parte de la guerrilla eperrista y miembro de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca ( APPO), solo tenía el grado de combatiente, no así José Ambrocio Martínez, que es considerado por instituciones de inteligencia comandante del EPR y ex participante de otros presuntos secuestros entre ellos el de un ganadero y agricultor en el 2007, plagio en el que también habrían presuntamente participado Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, según se habla en los círculos militares.
Junto con José Ambrocio Martínez y/o José Ambrocio Martínez Gómez, se encuentran otros presuntos miembros del EPR de las unidades Oaxaca y Estado de México, que fueron dejados con un perfil bajo por parte de la PGR, en un intento de no vincular el secuestro con la guerrilla. No se habla de Leonel Manzano Sosa cuñado de Rafael Vicente Rodríguez Enriquez, integrante del EPR y ex dirigente de la sección XXII, asesinado sin que hasta el momento su crimen se haya aclarado, al parecer fue un ajusticiamiento al interior de la misma organización guerrillera debido a la vida que opto por llevar el ex combatiente.
Hay un individuo de nombre Enrique Guerrero Aviña, también presuntos integrante de la estructura del EPR, este sujeto habría participado el 27 de octubre de 2006 durante el enfrentamiento en Santa Lucia del Camino, lugar donde perdió la vida Bardley Ronald Willey mejor conocido como Brad Will. Las instituciones de inteligencia colocan a Enrique Guerrero Aviña como una persona peligrosa, porta arma y es un sujeto al igual que José Ambrocio Martínez dogmático. Enrique Guerrero Aviña alias "Fito", era uno de los hombres de confianza de José Ambrocio Martínez durante el secuestro.
Hay quienes se preguntan, ¿como es que fueron ubicados? Desde un principio el mismo día del secuestro de los niños Álvarez Benfield, una de las líneas de investigación fue la guerrilla, definir que grupo era, fue el reto, no obstante la línea del crimen organizado nunca dejó de estar presente, la guerrilla tomó clara muestra de que hacia esos grupos se inclinaba la investigación. El mismo gobernador de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo, fue informado que los grupos de inteligencia tanto civiles como militares, definían a la guerrilla por su modus operandi como la que había llevado a cabo el secuestro de los niños Álvarez Benfield.
Se le dio seguimiento a diferentes líderes y "luchadores sociales" identificados a la corriente dogmática que el Estado tiene identificados como guerrilleros de diferentes organizaciones, incluso era en el propio edificio sindical de la 22 y el Hotel del Magisterio donde varias de las ocasiones se entrevistaron para planear acciones creyendo que no eran escuchados.
Los cuerpos de inteligencia sabiendo que no le tenían confianza al gobernador de Oaxaca, debido a que los profesores eran sus aliados políticos ( como ahora se demuestra), decidieron en abril de 2013, operar la Unidad de Estrategia Anti Secuestro, que utilizó a expertos en diferentes especialidades: Comunicaciones, Operativo, Encriptación, Guerrilla, Seguimiento y localización, Inteligencia, dando como resultado del seguimiento de profesores de la S-22. El primero que a decir de los detectives se comenzó a seguir fue al profesor Mario Olivera Osorio , el cual en varias de las ocasiones presuntamente se entrevistó incluso en la casa de la Colonia Gómez Sandoval del profesor Erangelio Mendoza González.
Aunque hay que aclarar que la Unidad Especial que contaba con 12 especialistas jamás informó al gobernador de Oaxaca sobre los detalles de las investigaciones, porque temían que hubiera filtraciones, debido a que el mandatario oaxaqueño tiene alianzas políticas con el magisterio democrático y eso ponía en peligro la operación. Esta unidad intervino a petición de la familia de los infantes secuestrados debido a que no hubo confianza en las autoridades del gobierno de Oaxaca. Personalmente Juan José Álvarez Candiani hablaron con el Procurador General de Justicia y con el Secretario de Gobernación para que los ayudará el gobierno federal.
Al final después de casi dos meses fueron identificadas todos y cada uno de los integrantes de la célula, incluso de todos aquellos que desde el Estado de México le daban cobertura operativa, como eran las ordenes que desde la comandancia general se daban en torno a la retención contra su voluntad de los niños Álvarez.
Sin embargo Punto y Aparte que la PGR se reserve el génesis político-militar de los integrantes de la unidad que mantenía secuestrados a los niños, el secuestro se realizó y son presuntos culpables quienes de alguna manera son protegidos por el magisterio de la S-22 y el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué.
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