¿EN MÉXICO VIVIMOS UNA GUERRA CIVIL
ALENTADA POR UNA RAZÓN DE ESTADO?
Juan José Díaz Bermúdez/Análisis
Oaxaca, México (Punto y Aparte).- La guerra civil que vive México, tras la decisión de Felipe Calderón de enfrentar según ha dicho, el narcotráfico que “afectaba a las familias mexicanas”, sobre todo a los jóvenes, ha derivado en un proyecto incontrolable para la fuerza pública en México. Tanto ha crecido, que podría el socio del gobierno de México, es decir Estados Unidos, ingresar a territorio mexicano para enfrentar y pacificar al país, que vive sin duda un enfrentamiento entre civiles, fuerzas irregulares ,ejército, marina armada y las policías federales. Parece que Calderón contrario a las enseñanzas de Tsu Tsu, se apresuró a la guerra
Con esta decisión de apresurarse a la guerra, sin tomar en cuenta los resultados del análisis técnico y operativo, Calderón le abrió la puerta al intervencionismo de los Estados Unidos, a través del plan Mérida, y más recientemente se vio claramente la intromisión de los Estados Unidos, tras la muerte del, agente Zapata- héroe dicen los norteamericanos- invasor afirman los mexicanos.
En las investigaciones para detener a sus ejecutores, participó no sólo el FBI, además la DEA entre otras agencias de ocupación de los Estados Unidos, que armados ingresaron a territorio mexicano, violando no solo el espacio aéreo, incluso el territorio con las facilidades que el ejército mexicano ofreció y que juró defender al país en su territorio.
Porque decimos que es una guerra civil, veamos: La definición de guerra civil que wikipedia da es el siguiente: Se denomina guerra civil a cualquier confrontamiento bélico cuyos participantes no son en su mayoría fuerzas militares regulares, sino que están formadas u organizadas por personas, generalmente de la población civil. Su característica más común es que el conflicto armado se desarrolla en un mismo país, enfrentándose entre sí personas de un mismo lugar (ciudad, pueblo o comunidad) defendiendo, generalmente, dos ideologías o intereses distintos. En algunos casos, el objetivo es la secesión de una parte del territorio.
En México tenemos un enfrentamiento de gran escala entre personas civiles, que son contra atacados por fuerzas militares y policíacas, pero que en si, se enfrentan por territorio, venganza, intereses económicos y aunque no existe ideología política, se puede encontrar un código de lucha e ideario que nace de las mismas organizaciones del crimen organizado.
Hay que notar, que la guerra que se libra en México, hasta hoy el mayor número de bajas ha sido civil, resultado del enfrentamiento entre bandas rivales, ejecutores y en algunas ocasiones existe la sospecha que los crímenes son cometidos por grupos perfectamente adiestrados para crear el caos, terror e incertidumbre.
¿A quien beneficia la guerra? Si decimos que a las organizaciones del crimen mentimos, esta guerra civil no beneficia a la población, pero si a quienes gobiernan. Dice un pensamiento anónimo Chino: “Siembra, caos terror y muerte y gobernaras en paz”.
Es curioso que antes de la llegada de Felipe Calderón a la presidencia de la república, se habló de un gran movimiento social-militar en todo México. Recordemos que 2006 fue la antesala a la llegada del considerado Presidente bélico. En Oaxaca se hablaba de una revolución para el 2010, incluso que se movilizarían a nivel nacional un número enorme de organizaciones como la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca ( APPO), que entrarían triunfantes a la ciudad de México para quitar al usurpador de la silla presidencial. López Obrador encabezaba un movimiento que tenía las características de un liderazgo natural, era evidente que se necesitaba urgentemente una alternativa o pretexto para militarizar a México y en el mismo proyecto pudo haberse incluido el plan aterrador de enfrentar a las bandas del crimen organizado, para generar lo que hoy vivimos: terror, muerte, destrucción, asesinatos en masa, secuestros de migrantes y la cacería de familias enteras incluyendo niños. El pánico en su máxima expresión.
Líneas atrás transcribíamos un anónimo Chino, que tiene una relación permanente con lo dicho por Maquiavelo cuando hablaba de la Razón de Estado. Facultad que puede tener un gobernante a través de medidas excepcionales, con el objetivo de conservar la salud y la fuerza del sistema o Estado en este caso. Tomando en consideración por supuesto, que la perseverancia que tenga el Estado, debe ser un valor superior a los derechos individuales y colectivos. Los gobiernos fascistas han sido parte esencial a través de mentiras, para desencadenar funestas guerras. Recordemos a Hitler a Franco en España, Díaz Ordaz en México, Pinochet en Chile.
En el caso reciente del país, las medidas legaloides que se inventó el PAN a través de Calderón para militarizar a México, podrían tener razones aceptables, si tomamos en cuenta que el crimen organizado que muestran los medios de comunicación masivos, integrados al proyecto, son organizaciones que no respetan familias y en los últimos días a los niños. Llama poderosamente la atención, no hay mayor indignación entre el pueblo el ver a los asesinos acribillando infantes. Estados Unidos lo aprendió en Viet Nam, recordemos a la niña vietnamita corriendo quemada, desnuda y aterrada entre invasores yanquis, esa foto hizo perder la guerra a los Estados Unidos.
Son las mismas técnicas, aterrizadas en un país del tercer mundo, en donde se esgrimió una propuesta: “librar a los jóvenes de la droga”, “Para que no llegue a tus hijos”. Campañas en ocasiones infantiles, propias de la derecha, que advertían de la amenaza de los cárteles los cuales por cierto habían invadido escuelas, para el gobierno de Calderón había niños que consumían en primaria cocaína y marihuana. Ni en los Estados Unidos que es el principal consumidor del mundo, se pudo presentar que los infantes consumieran, pero en México, para Calderón si. Es decir, los mexicanos por fin superamos a los estadounidenses.
Por supuesto no discutimos la peligrosidad de los cárteles, mucho menos la influencia que existía por parte de estos en la vida política del país, tan es así, que se habla de la interrelación que había entre políticos y delincuentes. Es cierto existían, existen y existirán, pero no, en la magnitud en la que el PAN con Calderón, quiso mostrar.
Los grupos delincuenciales, amenazaban no el territorio mexicano, sino el norteamericano, ¿era factible que México declarará una lucha, hoy convertida en guerra civil, que ya lleva más de 28 mil muertos? Existe la sospecha, que se inició la lucha, sin reparar en las consecuencias, minimizó imprudentemente Calderón a las organizaciones del crimen, recodemos que las llamó “minorías ridículas”. Lo grave es que, el país lleva tres años de guerra y no se ve el final.
Calderón como un mal General, -jefe máximo del ejército mexicano- se apresuró a la guerra, temiendo que el país lo obligará a renunciar, luego de las elecciones en las que resultó ganador. México enteró le gritaba usurpador, era necesario desviar la atención, militarizar el país, obligando a las fuerzas políticas a sumarse al proyecto luego de los escalofriantes asesinato cometidos por el crimen organizado.
Pero sigamos con el análisis de la Razón de Estado, que Calderón pudo haber tenido para militarizar a México y lanzar una guerra sin cuartel, que conforme pasan los días pareciera que toma las dimensiones de una guerra civil. Es claro que la legitimidad de Felipe Calderón, obligó a este, a lanzar la ofensiva contra los cárteles, más allá de las razones militares, las políticas no fueron lo suficientemente claras, ya que el haber tomado este tipo de medidas, no ofrecen resultados positivos del medio empleado con el beneficio obtenido por la población. Más que acierto fue un fracaso para Calderón y el PAN, el haber sacado al ejército a las calles, después de incendiar al país y ahogar a México en un mar de sangre, según han dicho diferentes ponentes del tema, fue el fracaso de tal manera que no ganará las elecciones en el 2012.
Las medidas que Calderón utilizó para enfrentar al crimen organizado, podrían tener vigencia militar, pero de dudosa ética y hasta tiránicas.
Muy aparte de la teoría, lo cierto es que México, lleva más de tres años de una lucha fratricida, los cerca de 30 mil muertos hablan mal de un gobierno, que se desespera por encontrar una razón valida, ética y moral.
Como disculparse por los atropellos, los daños colaterales, el asesinato de niños no solo por el crimen, sino también por policías y militares.
México está en la razón de la definición de una guerra civil, una cifra de muertos que superó no solo a Irak y Afganistán, también una guerra sicológica que afectó a todo un país. Quién va a pedir disculpas a México, ¿por este atropello?, es claro que Felipe Calderón, la pregunta es, ¿Cuándo?
ALENTADA POR UNA RAZÓN DE ESTADO?
Juan José Díaz Bermúdez/Análisis
Oaxaca, México (Punto y Aparte).- La guerra civil que vive México, tras la decisión de Felipe Calderón de enfrentar según ha dicho, el narcotráfico que “afectaba a las familias mexicanas”, sobre todo a los jóvenes, ha derivado en un proyecto incontrolable para la fuerza pública en México. Tanto ha crecido, que podría el socio del gobierno de México, es decir Estados Unidos, ingresar a territorio mexicano para enfrentar y pacificar al país, que vive sin duda un enfrentamiento entre civiles, fuerzas irregulares ,ejército, marina armada y las policías federales. Parece que Calderón contrario a las enseñanzas de Tsu Tsu, se apresuró a la guerra
Con esta decisión de apresurarse a la guerra, sin tomar en cuenta los resultados del análisis técnico y operativo, Calderón le abrió la puerta al intervencionismo de los Estados Unidos, a través del plan Mérida, y más recientemente se vio claramente la intromisión de los Estados Unidos, tras la muerte del, agente Zapata- héroe dicen los norteamericanos- invasor afirman los mexicanos.
En las investigaciones para detener a sus ejecutores, participó no sólo el FBI, además la DEA entre otras agencias de ocupación de los Estados Unidos, que armados ingresaron a territorio mexicano, violando no solo el espacio aéreo, incluso el territorio con las facilidades que el ejército mexicano ofreció y que juró defender al país en su territorio.
Porque decimos que es una guerra civil, veamos: La definición de guerra civil que wikipedia da es el siguiente: Se denomina guerra civil a cualquier confrontamiento bélico cuyos participantes no son en su mayoría fuerzas militares regulares, sino que están formadas u organizadas por personas, generalmente de la población civil. Su característica más común es que el conflicto armado se desarrolla en un mismo país, enfrentándose entre sí personas de un mismo lugar (ciudad, pueblo o comunidad) defendiendo, generalmente, dos ideologías o intereses distintos. En algunos casos, el objetivo es la secesión de una parte del territorio.
En México tenemos un enfrentamiento de gran escala entre personas civiles, que son contra atacados por fuerzas militares y policíacas, pero que en si, se enfrentan por territorio, venganza, intereses económicos y aunque no existe ideología política, se puede encontrar un código de lucha e ideario que nace de las mismas organizaciones del crimen organizado.
Hay que notar, que la guerra que se libra en México, hasta hoy el mayor número de bajas ha sido civil, resultado del enfrentamiento entre bandas rivales, ejecutores y en algunas ocasiones existe la sospecha que los crímenes son cometidos por grupos perfectamente adiestrados para crear el caos, terror e incertidumbre.
¿A quien beneficia la guerra? Si decimos que a las organizaciones del crimen mentimos, esta guerra civil no beneficia a la población, pero si a quienes gobiernan. Dice un pensamiento anónimo Chino: “Siembra, caos terror y muerte y gobernaras en paz”.
Es curioso que antes de la llegada de Felipe Calderón a la presidencia de la república, se habló de un gran movimiento social-militar en todo México. Recordemos que 2006 fue la antesala a la llegada del considerado Presidente bélico. En Oaxaca se hablaba de una revolución para el 2010, incluso que se movilizarían a nivel nacional un número enorme de organizaciones como la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca ( APPO), que entrarían triunfantes a la ciudad de México para quitar al usurpador de la silla presidencial. López Obrador encabezaba un movimiento que tenía las características de un liderazgo natural, era evidente que se necesitaba urgentemente una alternativa o pretexto para militarizar a México y en el mismo proyecto pudo haberse incluido el plan aterrador de enfrentar a las bandas del crimen organizado, para generar lo que hoy vivimos: terror, muerte, destrucción, asesinatos en masa, secuestros de migrantes y la cacería de familias enteras incluyendo niños. El pánico en su máxima expresión.
Líneas atrás transcribíamos un anónimo Chino, que tiene una relación permanente con lo dicho por Maquiavelo cuando hablaba de la Razón de Estado. Facultad que puede tener un gobernante a través de medidas excepcionales, con el objetivo de conservar la salud y la fuerza del sistema o Estado en este caso. Tomando en consideración por supuesto, que la perseverancia que tenga el Estado, debe ser un valor superior a los derechos individuales y colectivos. Los gobiernos fascistas han sido parte esencial a través de mentiras, para desencadenar funestas guerras. Recordemos a Hitler a Franco en España, Díaz Ordaz en México, Pinochet en Chile.
En el caso reciente del país, las medidas legaloides que se inventó el PAN a través de Calderón para militarizar a México, podrían tener razones aceptables, si tomamos en cuenta que el crimen organizado que muestran los medios de comunicación masivos, integrados al proyecto, son organizaciones que no respetan familias y en los últimos días a los niños. Llama poderosamente la atención, no hay mayor indignación entre el pueblo el ver a los asesinos acribillando infantes. Estados Unidos lo aprendió en Viet Nam, recordemos a la niña vietnamita corriendo quemada, desnuda y aterrada entre invasores yanquis, esa foto hizo perder la guerra a los Estados Unidos.
Son las mismas técnicas, aterrizadas en un país del tercer mundo, en donde se esgrimió una propuesta: “librar a los jóvenes de la droga”, “Para que no llegue a tus hijos”. Campañas en ocasiones infantiles, propias de la derecha, que advertían de la amenaza de los cárteles los cuales por cierto habían invadido escuelas, para el gobierno de Calderón había niños que consumían en primaria cocaína y marihuana. Ni en los Estados Unidos que es el principal consumidor del mundo, se pudo presentar que los infantes consumieran, pero en México, para Calderón si. Es decir, los mexicanos por fin superamos a los estadounidenses.
Por supuesto no discutimos la peligrosidad de los cárteles, mucho menos la influencia que existía por parte de estos en la vida política del país, tan es así, que se habla de la interrelación que había entre políticos y delincuentes. Es cierto existían, existen y existirán, pero no, en la magnitud en la que el PAN con Calderón, quiso mostrar.
Los grupos delincuenciales, amenazaban no el territorio mexicano, sino el norteamericano, ¿era factible que México declarará una lucha, hoy convertida en guerra civil, que ya lleva más de 28 mil muertos? Existe la sospecha, que se inició la lucha, sin reparar en las consecuencias, minimizó imprudentemente Calderón a las organizaciones del crimen, recodemos que las llamó “minorías ridículas”. Lo grave es que, el país lleva tres años de guerra y no se ve el final.
Calderón como un mal General, -jefe máximo del ejército mexicano- se apresuró a la guerra, temiendo que el país lo obligará a renunciar, luego de las elecciones en las que resultó ganador. México enteró le gritaba usurpador, era necesario desviar la atención, militarizar el país, obligando a las fuerzas políticas a sumarse al proyecto luego de los escalofriantes asesinato cometidos por el crimen organizado.
Pero sigamos con el análisis de la Razón de Estado, que Calderón pudo haber tenido para militarizar a México y lanzar una guerra sin cuartel, que conforme pasan los días pareciera que toma las dimensiones de una guerra civil. Es claro que la legitimidad de Felipe Calderón, obligó a este, a lanzar la ofensiva contra los cárteles, más allá de las razones militares, las políticas no fueron lo suficientemente claras, ya que el haber tomado este tipo de medidas, no ofrecen resultados positivos del medio empleado con el beneficio obtenido por la población. Más que acierto fue un fracaso para Calderón y el PAN, el haber sacado al ejército a las calles, después de incendiar al país y ahogar a México en un mar de sangre, según han dicho diferentes ponentes del tema, fue el fracaso de tal manera que no ganará las elecciones en el 2012.
Las medidas que Calderón utilizó para enfrentar al crimen organizado, podrían tener vigencia militar, pero de dudosa ética y hasta tiránicas.
Muy aparte de la teoría, lo cierto es que México, lleva más de tres años de una lucha fratricida, los cerca de 30 mil muertos hablan mal de un gobierno, que se desespera por encontrar una razón valida, ética y moral.
Como disculparse por los atropellos, los daños colaterales, el asesinato de niños no solo por el crimen, sino también por policías y militares.
México está en la razón de la definición de una guerra civil, una cifra de muertos que superó no solo a Irak y Afganistán, también una guerra sicológica que afectó a todo un país. Quién va a pedir disculpas a México, ¿por este atropello?, es claro que Felipe Calderón, la pregunta es, ¿Cuándo?